viernes, 16 de enero de 2015

El Artista

                                 
El arte es un tormento que Dios pone en el alma
La carne, el instrumento que el arte hace vibrar,
Y el sueño de un artista, es trágico suplicio
Es hondo sacrificio que nadie ha de pagar.

El público no sabe, lo mucho que se implora
Lo mucho que se llora en busca del laurel,
El público no sabe las horas de amargura
Las noches de tortura, para cumplir con él.

El alma de la gente no entiende que en un paso
Se juegan los payasos, la vida y el amor,
Ni piensa que en el trance que saca la sonrisa
El alma se hace trizas y sangra el corazón.

Yo pido a los que tienen un corazón humano
Que sientan como hermanos, que ayuden a sufrir,
A los que abrigan sueños, a los que vuelcan cantos
A los que sufren tanto la pena de vivir.

Aquí cayó vencida, sobre esta misma arena
Una muchacha buena vejada sin razón,
Yo exijo a las conciencias que la vieron caída
Con emoción sentida les pidan su perdón.




Mil gracias en su nombre y en el de los artistas
Que entramos a la pista con toda la emoción,
La fuerza de ese aplauso, la luz de este momento
Es el mejor aliento a nuestro corazón.


Letra : Homero Manzi  (Homero Nicolás Manzione Prestera)
Música : Sebastián Piana
De la banda de sonido de la película “El último payador”, (1949), Hugo del Carril con acompañamiento de guitarras.
(letra obtenida de la grabación)